Descripción
Segundo disco del sexteto experimental chileno, Konfusión Unitaria Transformista, tras su novedoso debut homónimo de 2007. Al igual que en su antecesor, en este nuevo registro, la agrupación del bajista Raúl Díaz, el baterista Matías Mardones, el guitarrista Marcelo Troncoso, el saxofonista Edén Carrasco y los trompetistas Sebastián Carrasco y Benjamín Vergara, proponen ese sonido crudo, primitivo y, casi impúdico, que ha caracterizado la estética musical de la banda.
En once composiciones originales –en el anterior habían covers libres de Sun Ra y Massacre- , se aparece el influjo de géneros y sub-estilos, como free-jazz, rock in opossition, downtown de Nueva York, música docta contemporánea y jazz-rock eléctrico a la Miles Davis. En todas las piezas, se entrecruzan melodías angulares, en diálogos llenos de potencia e intención, que dan como resultado, una invitación musical urgente, riesgosa y alejada del sentido común.
El comienzo con “Por Obstinación”, impacta de inmediato, por la aspereza de su sonido y la fuerza de los instrumentos de viento tocados al unísono. Algo hay de Henry Cow en la estética inclemente y en las secciones melódicas fragmentadas. Una apertura atronadora, que no baja en intensidad en “Nerviosis”, otra composición de hiperquinética actividad.
Ambas son contrarrestadas, por el sentimiento más calmo y jazzístico de “Caminando Lento” que, sin embargo, mantiene la aspereza del sonido característico de La Kut. “Hu” regresa con fuerza, a las dinámicas e interacciones que se alternan entre los diversos instrumentos, mientras que “Marchita”, algo recuerdo los vientos espirituales de “In A Silent Way” de Davis, pero con su sonido más visceral y, por momentos, épico.
La extensa “Negras y Corcheas”, toma para sí el experimentalismo improvisado ya marca registrada de estos músicos, en una pieza que se va construyendo por medio de sonidos poco ortodoxos y un final endemoniado de ruidismo y saturación. El álbum no baja su ímpetu con la más lúdica “Canta y Canta”, mientras que la extensa “Variaciones”, se debate entre la composición definida y la improvisación libertaria.
“Joroba” y “Kraper”, siguen profundizando en la estética de la banda, por medio de líneas melódicas de viento bien definidas, rítmicas sincopadas, guitarras filosas y el bajo de Díaz, por primera vez, ejecutado con un efecto de distorsión. En tanto, “Un Minuto de Silencio”, es exactamente aquello, un track mudo, en una especie de homenaje a John Cage y, al mismo tiempo, una reflexión entre la dialéctica inseparable que existe entre música y silencio.
Aparte de la crudeza del sonido, se puede percibir en La Kut, un meta relato de ironía, desfachatez y protesta, que se agradece y que, en ningún momento, es ampuloso o pretende evangelizar. Al contrario, La Kut es una banda de jazz de vanguardia y rock experimental, pero con un claro enfoque punk en su actitud. Un gran segundo disco.
Héctor Aravena A.
- Grabado en el invierno de 2009 en estudio RíoCaliente.
- Mezclado y masterizado en la primavera de 2010 por Diego Bustamante en estudio Ambos Tres.
- Re edición 2014 / Ilustraciones: Matías Mardones
